Todos sabemos que los preciosos veleros no son el barco más fácil de gobernar. A priori las velas en un barco puede parecer sencillo, pero en realidad, es un arte que requiere habilidad y mucha experiencia, pero no os preocupéis que para eso estamos nosotros aquí, para enseñaros.
En el artículo de hoy queremos tratar y hablar sobre el uso de las velas en diferentes situaciones meteorológicas ya que es importante saber cómo ajustar las velas en casa situación. Si queréis aprender a navegar con vela no olvideis que en el curso de PER, te enseñaremos todo lo que debes saber sobre este arte.
Con viento ligero: Cuando hay poco viento, tienes que asegurarte de que las velas estén completamente desplegadas para aprovechar al máximo la poca cantidad de viento disponible y así poder avanzar todo lo que se pueda. Mantén las velas bien ajustadas y trata de mantener una dirección constante, ya que cualquier cambio brusco podría afectar la velocidad del barco y esto podría ser peligrosos, sobretodo si estás en una zona de islas o rocosa.
Con viento moderado: Con vientos moderados, es sencillo, solo es ajustar las velas para mantener una velocidad constante. Asegúrate siempre de que las velas estén bien tensas para que no se deformen o se agiten en exceso ya que esto podría perjudicar tanto tu estabilidad como el estado de tus velas.
Si el viento se vuelve más fuerte, debes comenzar a reducir la superficie de las velas plegandolas para evitar que el barco se incline demasiado y tengas el riesgo de volcar.
Con viento fuerte: Si tenemos un viento fuerte, debes reducir la superficie de las velas para evitar que el barco se incline demasiado y se vuelva inestable además de que puedes perder el control de la velocidad. En estas condiciones, es posible que debas cambiar a velas más pequeñas o incluso desmontar las velas por completo si el viento es demasiado fuerte recuerda que, la seguridad es lo primero, y que hay días que es preferible no navegar a hacerlo y ponerte en peligro.
Con viento en contra: Aquí la cosa empieza a complicarse, esta parte es la que más le cuesta a todo marinero , sobretodo cuando se aprende, ya que no es algo muy convencional el tener que ir en contra del viento, pero está situación es bastante común. Si el viento está en contra, el truco está virar las velas para maximizar el ángulo y minimizar la resistencia, debes intentar que el viento pase por las velas y hacer que avances en zigzag. Todo es práctica.
Con el viento a favor: Bueno, esto creo que todo grumete puede hacerlo, simplemente es desplegar velas por completo para aprovechar al máximo la velocidad del viento. Y como hemos dicho anteriormente si el viento es demasiado fuerte, es posible que debas reducir la superficie de las velas para evitar que el barco se incline demasiado y puedas volcar.
En cualquier caso, tened muy en cuenta las condiciones climáticas, hay veces que por mucho que queramos no es nada aconsejable salir. Debéis siempre comprobar el estado del viento según la escala Beaufort y si sobrepasa los límites es mejor que os quedéis en tierra.
Con la práctica y la experiencia, podrás ajustar las velas con facilidad y navegar con confianza en cualquier condición climática, ningún mar en calma hizo experto al marinero, pero siempre desde la seguridad y el conocimiento.